Un problema muy habitual en la ingeniería civil es la presencia de huecos o cavidades de geometría y posición desconocida en el sustrato sobre el que se va a cimentar un proyecto.

El origen de estas cavidades es muy diverso, pudiendo ser de origen natural (fenómenos cársticos y de disolución química en materiales carbonáticos) o de origen artificial (antiguas bodegas,túneles excavados, galerías, minas…)

La presencia de huecos que afectan a una construcción puede darse en multitud de ámbitos, y en materiales distintos. Para garantizar el éxito de la prospección geofísica el primer paso es un diseño efectivo de la campaña de campo.

Lo más importante es determinar la técnica a utilizar más adecuada, puesto que cada una de ellas tiene limitaciones. Por ejemplo, si hay hormigón armado o arcillas húmedas entre la superficie y el objetivo, no se debe usar Geo Radar; si las cavidades son muy pequeñas o se encuentran a mucha profundidad, no se debe emplear la sísmica pasiva…

En Orbis tratamos siempre de combinar una de estas dos técnicas con Tomografía Eléctrica, que es la técnica más versátil y efectiva, siempre que se defina correctamente la relación resolución / profundidad del objetivo.

Finalmente, integramos todos los datos y obtenemos modelos 3D de las cavidades para que el cliente pueda trabajar en su diseño con un profundo conocimiento del problema al que se enfrenta.